Monserrat: el barrio histórico y su mercado de propiedades en Buenos Aires

Monserrat: el barrio histórico y su mercado de propiedades en Buenos Aires dic, 7 2025

En el corazón de Buenos Aires, donde el ruido de los colectivos se mezcla con el eco de viejos edificios de ladrillo visto, está Monserrat. No es solo un barrio más. Es el lugar donde nació la ciudad. Donde los primeros conventos se levantaron en el siglo XVI, donde se firmaron las primeras leyes de la independencia, y donde hoy, entre calles estrechas y fachadas desgastadas por el tiempo, se mueve un mercado de propiedades tan vivo como el de hace cien años.

Un barrio que no dejó de crecer, aunque parezca que se detuvo

Monserrat no tiene jardines públicos grandes ni paseos peatonales modernos. Pero tiene algo que otros barrios no pueden copiar: autenticidad. Sus edificios son testigos silenciosos de la historia. El Congreso Nacional, con su cúpula dorada, domina la avenida Rivadavia. Al lado, el Cabildo, restaurado con cuidado, sigue siendo el símbolo del poder colonial. Pero lo que pocos ven es que, detrás de esas fachadas monumentales, hay decenas de casas de dos pisos, departamentos con balcones de hierro forjado y locales comerciales que han pasado de generación en generación sin cambiar de dueño.

Esto no es casualidad. Monserrat ha sido un barrio de transición desde siempre. En los años 50, era popular entre inmigrantes italianos y españoles que trabajaban en el puerto. En los 80, muchas de esas viviendas se convirtieron en oficinas pequeñas. Hoy, son buscadas por inversores que saben que aquí no se trata de remodelar para vender rápido, sino de restaurar para mantener.

¿Qué tipo de propiedades se venden en Monserrat?

Si buscas un departamento moderno con piso flotante y cocina americana, Monserrat no es tu lugar. Pero si quieres una propiedad con historia, con sus pisos de parqué original, sus techos altos, sus puertas de madera maciza y sus ventanales que dejan entrar la luz del atardecer como en 1920, entonces sí.

Las propiedades más comunes son:

  • Departamentos de 60 a 90 m² en edificios de los años 20 y 30, con escaleras de mármol y ascensores antiguos que aún funcionan
  • Casas de un piso con patio interior, muchas de ellas convertidas en consultorios, estudios de arte o pequeñas librerías
  • Locales comerciales en esquinas, con fachadas de vidrio y puertas de madera, ideales para cafés, tiendas de antigüedades o galerías
  • Edificios completos de hasta 12 departamentos, comprados por fondos de inversión para renovarlos y alquilarlos a largo plazo

El precio promedio por metro cuadrado en Monserrat ronda los 3.800 dólares estadounidenses, según datos de la Cámara Inmobiliaria de Buenos Aires de 2025. Eso lo hace más barato que Palermo o Recoleta, pero más caro que La Boca o San Telmo. La diferencia está en la estabilidad. Mientras en otros barrios los precios suben y bajan con la inflación, en Monserrat los valores se mantienen firmes. Porque aquí no se compra por moda. Se compra por herencia.

Interior de departamento histórico en Monserrat con pisos de parqué, techos altos y luz cálida entrando por ventanas grandes.

Quién compra en Monserrat y por qué

No es un barrio para turistas que quieren una casa de vacaciones. Tampoco es para jóvenes que buscan un departamento barato para vivir solos. Aquí compran tres tipos de personas:

  1. Inversores con visión larga: Empresas que compran edificios enteros, los restauran con materiales originales y los alquilan a profesionales, artistas o expatriados. El retorno anual promedio es del 6,5%, sin contar la revalorización.
  2. Familias con raíces históricas: Hijos o nietos de quienes vivieron aquí en los años 60. Regresan para recuperar la casa de sus abuelos, restaurarla y vivir en ella. No les importa que no tenga aire acondicionado moderno. Les importa que la puerta principal sea la misma que abrió su bisabuelo.
  3. Cooperativas de artistas y escritores: Grupos que compran viviendas juntos, las dividen en espacios de trabajo y vivienda, y las mantienen como una comunidad. Hay al menos siete de estas cooperativas activas en Monserrat, según el Registro de Propiedad Colectiva de la Ciudad.

Lo que todos tienen en común es que no buscan ganar rápido. Buscan permanecer. Y eso hace que el mercado sea distinto. No hay especulación. No hay ofertas de "vende tu departamento en 72 horas". Aquí, las propiedades se venden por palabra, por confianza, por conocimiento del barrio.

El mercado no es como los portales inmobiliarios te dicen

Si buscas una propiedad en Monserrat en MercadoLibre, Properati o Zonaprop, te vas a llevar una sorpresa. La mayoría de los anuncios son falsos. O son de propiedades que ya no existen, o son de edificios que están en proceso de demolición. El mercado real no se publica en línea. Se mueve por redes personales.

Los agentes inmobiliarios que trabajan en Monserrat no tienen páginas web. Tienen una oficina en la calle Perú, con una puerta de madera que crujía antes de que la pintaran. Allí, los compradores van con una carta de recomendación, con una historia, con un nombre. Si no conoces a alguien que conozca a alguien, es casi imposible entrar.

La mayoría de las transacciones se hacen con dinero en efectivo, en pesos, pero con el valor referenciado en dólares. Es una práctica común desde la crisis de 2001. No hay hipotecas bancarias. Los préstamos son privados, entre familias o con fondos de inversión locales. Los contratos no son largos. Son simples: "Vendo departamento en Monserrat, con su historia, por X cantidad. El comprador asume el mantenimiento y la restauración según normas patrimoniales".

Tres manos sobre una mesa de madera con un documento, una llave y una foto familiar, en una oficina antigua de Monserrat.

Lo que nadie te dice: los límites y los riesgos

Comprar en Monserrat no es fácil. Y no es para todos. Hay reglas estrictas. La Ciudad de Buenos Aires tiene un registro de edificios protegidos. Si tu propiedad está en ese listado, no puedes cambiar la fachada, ni sacar paredes internas, ni instalar aire acondicionado en la fachada. Tienes que usar materiales originales. Si quieres cambiar una ventana, debes pedir permiso y presentar un plano hecho por un arquitecto especializado en patrimonio.

Esto puede ser un obstáculo. O una ventaja. Porque mientras otros barrios se llenan de departamentos idénticos, Monserrat se mantiene único. Pero también significa que la inversión requiere paciencia. Una restauración completa puede tardar entre 18 y 36 meses. Y no hay subsidios del gobierno. Todo lo pagas tú.

Además, hay riesgos legales. Muchas propiedades tienen herederos dispersos. Si no investigas bien el título de propiedad, puedes terminar en un juicio que dura años. Por eso, todos los compradores serios contratan un notario especializado en patrimonio histórico. No es un gasto. Es una necesidad.

¿Vale la pena comprar en Monserrat en 2025?

Si buscas una inversión que se mantenga en el tiempo, sí. Si quieres una casa para vivir con alma, sí. Si esperas que tu propiedad se duplique en cinco años, no.

En 2025, el mercado de Monserrat está más estable que nunca. La demanda de propiedades auténticas ha crecido un 22% en los últimos tres años, según el Informe de Mercado Inmobiliario de la UBA. Los extranjeros, especialmente de Europa y Canadá, están volviendo a interesarse por el barrio. Pero no por turismo. Por raíces. Por historia. Por el deseo de vivir en un lugar que no se vende en Instagram.

Las nuevas construcciones son casi inexistentes. No hay rascacielos. No hay edificios de lujo. Monserrat no se vende como un producto. Se vive como una experiencia. Y eso, en una ciudad que cambia cada año, es lo más valioso que hay.

¿Cuál es el precio promedio de una propiedad en Monserrat en 2025?

El precio promedio por metro cuadrado en Monserrat es de 3.800 dólares estadounidenses, según datos de la Cámara Inmobiliaria de Buenos Aires. Los departamentos pequeños (60-70 m²) oscilan entre 230.000 y 270.000 dólares, mientras que las casas con patio pueden superar los 500.000 dólares, dependiendo del estado y la ubicación exacta.

¿Se pueden hacer remodelaciones en las propiedades de Monserrat?

Sí, pero con restricciones. Si la propiedad está catalogada como patrimonial, no puedes alterar la fachada, los techos, los pisos originales ni los elementos arquitectónicos clave. Las remodelaciones internas están permitidas, siempre que se respete la estructura. Se requiere un permiso especial de la Dirección General de Patrimonio de la Ciudad, y los materiales deben ser similares a los originales.

¿Es fácil conseguir financiamiento para comprar en Monserrat?

No. Los bancos rara vez otorgan hipotecas para propiedades en barrios históricos como Monserrat. La mayoría de las compras se hacen con dinero en efectivo o mediante préstamos privados entre familias o fondos de inversión locales. El mercado funciona con confianza y redes personales, no con formularios bancarios.

¿Qué tipo de personas compran propiedades en Monserrat?

Tres grupos principales: inversores que buscan alquileres a largo plazo, familias que recuperan casas de sus antepasados y cooperativas de artistas o profesionales que comparten espacios. Todos tienen en común que no buscan ganancias rápidas, sino permanencia y conexión histórica.

¿Por qué no aparecen muchas propiedades en portales inmobiliarios?

Porque el mercado real de Monserrat no es digital. Las transacciones se hacen por recomendación, redes personales y encuentros en oficinas locales. Muchos anuncios en línea son falsos, de propiedades ya vendidas o en demolición. Para acceder al mercado auténtico, necesitas contactar a agentes locales o conocer a alguien que ya tenga una propiedad allí.